En ocasiones, tenemos problemas ya que asociamos pensamientos y emociones que nos llevan a preocuparnos excesivamente y sufrir. ¿Por qué ocurre? Como especie estamos programados para activarnos ante diversos estímulos donde solemos responder de forma coordinada con pensamientos, emociones o conductas en las que busquemos el placer y evitemos el dolor o la muerte.
Dada nuestra capacidad de divagación se produce una unión entre emoción y pensamiento. Nuestra tendencia natural a la catastrofización tendemos a unir dichas emociones con los pensamientos.