La infidelidad es un tema recurrente tanto en cualquier historia humana en general como en el contexto terapéutico en concreto. Además, nos guste o no, es un hecho bastante común, las estadísticas nos dicen que esto ocurrirá en alrededor de un 40% de las parejas casadas en, al menos, uno de los cónyuges.

Y decir que esta estadística puede ser más difícil de definir o haya subido, ya que ese dato es de 2014, y aunque ya hubiera Internet y redes sociales, el grado de lo que puede ser considerado infidelidad o no se va haciendo cada vez más borroso: ¿un acto físico sexual, mandarse fotos, mensajes, mirar otros perfiles?

Lo que sí está medianamente claro y bien estudiado es lo que provoca la sensación de infidelidad: una ruptura repentina de nuestro sistema de creencias que nos deja deprimidos, confundidos, culpables y avergonzados.

Más de Uno León con Javier Chamorro y Miguel Ángel Cueto (19 octubre 2022). Audio cortesía de Jorge Martínez.

Causas de la infidelidad

En la literatura científica hay un paradigma que explica que existirían tres marcadores principales para medir la calidad del vínculo marital: afecto, satisfacción y compromiso. También tendríamos otros componentes similares en nuestro cerebro: pasión, intimidad y compromiso, con lo que, cualquiera que uno de esos pilares falle, las posibilidades de que se produzca una infidelidad aumentan considerablemente.

Como ya hemos hablado en diferentes ocasiones, aferrarse al argumento de “somos infieles por naturaleza” pues algo de razón tiene, pero siempre que se sacan ese tipo de argumentaciones evolutivas, parece que luego nos olvidamos de otras (la mitad de los humanos solía morir antes de los 50 años).

La pareja en general y la infidelidad en concreto son fenómenos con tantas variables que encontrar causas únicas o simples es tremendamente complicado.

Consecuencias de la infidelidad

Está comprobado que después de una infidelidad, la persona que la sufre suele ver como aumentan los sentimientos o sensaciones propias de un proceso depresivo, como la desesperanza, pérdida de interés por hacer actividades y síntomas de ansiedad. Para evitar eso, hay estudios que muestra que una buena autoestima o autoconcepto actúa como factor protector a dichos síntomas.

Sería para ello conveniente tener un núcleo social más allá de nuestra pareja, ya que está probado, especialmente en aquellas personas con apego ansioso. Es mucho más difícil salir adelante si todo nuestro entorno desaparece de una tacada y tardaremos bastante más en poder recuperarnos en caso de ruptura.

¿La infidelidad supone la ruptura de la pareja?

En ocasiones es así, ya que una infidelidad suele ser uno de los “por ahí no paso” más comunes en la pareja, aunque no siempre.

Existen algunos factores que pueden ayudar a que, aunque suene raro, mejorar la relación de pareja. Incluso hay un modelo por pasos para poder llegar a una reconciliación: medir el impacto de la misma, búsqueda de un sentido vital y recuperación. En cuanto a esos factores, uno de ellos es le trabajo en el perdón, que además puede ser dividido en dos tipos: decisional y emocional. Tendría que haber una concordancia entre ambos (tanto por nuestra conducta como por nuestra emociones) para que hubiera una reconciliación completa, si una falla, es muy difícil que se produzca un indulto genuino.

Y que quede claro, podemos elegir perdonar o no, no tienen que obligarnos a ello. Y para que se produzca la reconciliación, tiene que haber un reconocimiento de la responsabilidad de la persona que la ha cometido y una reaseguración futura del mantenimiento de la fidelidad en el futuro.

¿Y si nos separamos?

Otra variables importante sería el denominado crecimiento post-traumático, aprovechar una circunstancia que nos ha generado un gran malestar para ver un nuevo sentido o camino vital, asumiendo de alguna manera que las cosas buenas que vengan a posteriori son causadas por una circunstancia que en sí es profundamente negativa (como enterarte que te están engañando).

Es decir, podemos incluso recuperarnos sin que esto deje una gran huella, pero esto depende de una grandísima cantidad de variables, como algunas de las explicadas anteriormente.

Bibliografía:

  • Chi, P., Tang, Y., Worthington, E. L., Chan, C. L., Lam, D. O., & Lin, X. (2019). Intrapersonal and interpersonal facilitators of forgiveness following spousal infidelity: A stress and coping perspective. Journal of clinical psychology, 75(10), 1896-1915.
  • Eisma, M. C., Tõnus, D., & de Jong, P. J. (2022). Desired attachment and breakup distress relate to automatic approach of the ex-partner. Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, 75, 101713.
  • OConnor, V., & Canevello, A. (2019). Recovery and moving on after breakups caused by infidelity. Journal of loss and trauma, 24(7), 636-649.
  • Shrout, M. R., & Weigel, D. J. (2020). Coping with infidelity: The moderating role of self-esteem. Personality and individual differences,154, 109631.