El día 7 de abril se celebró el Día Mundial de la Salud siendo el tema elegido para la campaña de la Organización Mundial de la Salud en este 2017 la depresión, que es el principal problema de salud y discapacidad en todo el mundo.

Podemos definir la depresión como un estado de ánimo de intenso abatimiento con pérdida de interés o placer por casi todas las actividades habituales. La persona que la padece se encuentra triste, decaída, desesperada, irritable y suele ir acompañada por determinados síntomas vegetativos y manifestaciones de auto-culpa y desprecio de sí misma. En su forma más grave, puede conducir al suicidio.

Audio: León en la Onda con Javier Chamorro y Miguel Ángel Cueto (5 abril 2017). Cortesía de Jorge Martínez.

Síntomas o características más relevantes

La depresión puede llegar a hacerse crónica o recurrente, y dificultar sensiblemente el desempeño en el trabajo, en la escuela y la capacidad para afrontar la vida diaria. Se suelen observar cambios en la alimentación con disminución del apetito o un aumento excesivo del mismo. También puede verse alterado el descanso nocturno presentándose insomnio o hipersomnia y se producen cambios en el nivel de actividad: enlentecimiento, apatía o agitación.

Hay pérdida de energía física, fatiga (astenia) y bajo deseo sexual. Dificultades en la atención, en la concentración y en la memoria. Ideas recurrentes de inutilidad, culpa excesiva o muerte. Dolores y malestares persistentes: dolores cabeza, cólicos o problemas digestivos, que no se alivian incluso con tratamiento.

Causas de la depresión

No existe una causa única conocida. Suele haber una concatenación de factores: estilos de pensamiento, problemas adaptativos, crisis vitales, aislamiento social, entorno estresante, actitud vital ante la vida. Parece ser el resultado de una combinación de factores genéticos, bioquímicos y psicológicos.

Los mejores resultados para tratar la depresión los produce la terapia combinada psicológica y farmacológica, pero antes de comenzar a tratar una depresión hay que descartar una serie de factores: Que no sea producida por una causa orgánica como pueden ser las enfermedades neurológicas, endocrinas, cardiovasculares, anemias… Que no sea una reacción normal ante la muerte de un ser querido. Que la persona no padezca un trastorno mental grave o que está asociada al consumo de alcohol y otras drogas.

Algunas pautas para la persona con depresión y su familia

  • Para la persona con depresión: Cuidar la alimentación y el sueño, hacer ejercicio, seguir haciendo actividades aunque hayan perdido alguna gratificación, hablar de sus emociones, no aislarse, limitar el uso de alcohol o drogas, aceptar las recidivas… Si tiene ideaciones suicidas pedir ayuda.
  • Para su familia: Aceptar que las personas que quieren al deprimido están también sufriendo, no enfadarse ni dar consuelo excesivo. Atenderle y sugerir, pero sin agobiar.
  • No reprochar al deprimido: Tienes que poner de tu parte. Este hecho carece de efecto, humilla y desmoraliza.
  • Prevenir el suicidio: Trataremos este tema en el próximo programa.

Audio completo (5 abril 2017): Onda Cero León.